¿A QUIÉN LE SIRVE EL NARCOTURISMO?

 “Hombre emergiendo a la vida” del artista chileno Mario Irrazabal

 (Ministerio de Turismo de Uruguay) 

¿Quiénes se benefician de la oferta  turística de mayor calidad?  Ante una temporada tan exitosa como la del verano 2017-2018 en Uruguay, incluso en la captura de los delincuentes mexicanos y  la recuperación del botín de la joyería del Hotel Conrad, los representantes del “sentido común”  suelen responder de forma característica. Pero sus opiniones tienen la convicción emocional y la seguridad que poseen los mitos. 

Lo paradójico es que todos los datos aquí expresados que permiten rechazarlos como lo que son (mitos), provienen de medios de comunicación tradicionales que tienden a consolidarlos.

MITO 1. Dicen los sensatos que balnearios, ciudades y propuestas turísticas de calidad “benefician en primer lugar a los propietarios de fincas, sea que las alquilen, con o sin intermediación, o porque las disfrutan para sí. Y también se benefician la inmobiliarias”.

Pero si unos y otras las alquilan y no practican la regla de “conozca a su cliente” eso es un peligroso caballo de Troya. Veamos aquí  los riesgos de la informalidad del quehacer inmobiliario, con una titulación que lo dice todo: “Alquileres quedan fuera de reportes sobre "lavado". Las autoridades llevaron tranquilidad a inmobiliarias en Punta del Este”. https://negocios.elpais.com.uy/alquileres-quedan-fuera-reportes-lavado.html 

Aquí vemos que las inmobiliarias, no conformes con la desregulación de hecho de la sana regla “conoce a tu cliente”, pese a los peligros de su incumplimiento, se preocupan por competidores que seguramente cometerán otras tantas desprolijidades, incluso con mayor facilidad: “Las inmobiliarias de Maldonado darán pelea al informalismo. Esta semana habrá reunión en Miami por portal Airbnb”. https://www.elpais.com.uy/informacion/inmobiliarias-maldonado-daran-pelea-informalismo.html

Es decir, que el beneficio de las inmobiliarias formalmente registradas no es muy merecido si no cumplen ciertas decisivas normas básicas y se pone en juego la seguridad de terceros. Y menos lo es el de las que operan en negro. Por ejemplo, el informativo Subrayado de Canal 10 informó  que “En Maldonado el informalismo se lleva casi el 90% del sector inmobiliario”. http://www.subrayado.com.uy/noticias/73070/en-maldonado-el-informalismo-se-lleva-casi-el-90-del-sector-inmobiliario

REALIDAD: ALGUNOS NEGOCIOS INMOBILIARIOS PREFIEREN NO CONOCER AL CLIENTE

MITO 2. Los “razonables” afirman con calma: “Se benefician los comerciantes, pero ellos pagan sus impuestos y a la vez obtienen su merecido lucro; así todos vemos entrar divisas al país y este virtuoso proceso  justifica mejor la propaganda del Ministerio de Turismo”.

Todos coinciden en que ha sido una temporada con 100% de ocupación (“Los operadores turísticos hablan de un fin de semana de carnaval con ocupaciones de hasta 100% en los balnearios del este y el litoral termal”, según El Observador, 13/02/2018)  y no debería haber excusas para cumplir con el Estado que les garantiza, entre otras cosas, la seguridad, las vías de tránsito y ofrece el marco legal de derechos y deberes que permiten operar. Claro que siempre se puede llorar. Porque el que no llora no mama: “Los turistas extranjeros dejaron en enero al país US$ 60 millones menos (unos US$ 439 millones) que el récord de la temporada anterior (US$ 499 millones)” (El Observador, 13/2/2018).

Pero regresemos a nuestros razonamientos. Ya hemos visto, en el caso de las inmobiliarias las irregularidades que suelen cometerse. ¿El personal de las inmobiliarias será formal y se pagarán las obligaciones sociales? Y además, ¿los hoteles y los restaurantes pagan sus impuestos, mantienen a sus trabajadores registrados en el BPS, o bien abusan de ellos y los contratan en  condiciones insalubres de trabajo?

En 2016, un informe de El Observador afirmaba que en Maldonado, especialmente en Punta del Este, la mitad trabaja en negro y que “las irregularidades laborales en hoteles y restaurantes superan el promedio nacional”.  https://www.elobservador.com.uy/inspeccion-detecto-50-informalidad-laboral-maldonado-n852787

En 2017, “la Inspección General del Trabajo recibió 3.216 denuncias laborales. Eso marcó un promedio de nueve denuncias diarias recibidas, según datos esa repartición. En el desglose, fueron 1.275 de condiciones ambientales de trabajo, 1.623 de condiciones generales y 318 sobre derechos fundamentales en el trabajo. La cifra total se ha mantenido estable en los últimos tres años”. https://www.elobservador.com.uy/mas-del-90-extranjeros-que-trabajan-temporada-son-argentinos-n1158064

REALIDAD: LA MITAD DE MALDONADO OPERA EN NEGRO

MITO 3. Dice el sentido común del “nuevo uruguayo” (como etiquetaba un aviso ya viejo hoy): “Para el conjunto heterogéneo de negocios que se vigoriza con el turismo, el sistema financiero es imprescindible y lo es también para el turista; a su vez el sistema financiero debe mantener sus reflejos ágiles para atender la demanda y estar atento a los nuevos  productos financieros que se utilizan en el mundo”.    

Pero, ¿alguien medianamente informado puede creer que las empresas financieras están libres de culpa? ¿Están seguros?  Más bien son una piedra en el zapato, o incluso una piedra en la frente misma de un Estado de Derecho.

Por ejemplo, en una entrevista memorable del periodista Daniel Figares con  Luis Alberto Lacalle, realizada en el año 2005 en el Canal 12,  fue muy claro lo que escuchó el ex presidente uruguayo  en una reunión con el ex presidente Bush (padre) y figuras internacionales de las finanzas y la política: si se legalizara la droga, la interrupción del flujo de depósitos provenientes del narcotráfico podría conducir a la quiebra de los bancos. Escuchar  el fragmento del video correspondiente a partir del minuto 8 y 12 segundos: https://www.youtube.com/watch?v=FC2P2Uy8OtA

Hay mucho más. El vínculo de las instituciones financieras, no solamente los bancos, con actividades propias del crimen organizado, fue explicado con tecnicismos exhaustivos en el documental Inside Job (Ferguson, 2010), más recientemente por la serie de Netflix Dirty Money (2018) y antes y después por una abrumadora lista de libros, diarios y revistas. En el Uruguay, la relación con el crimen organizado de estudios jurídicos y contables, profesionales universitarios, jueces y algunos políticos,  fue analizada de modo brillante por el periodista de investigación Antonio Ladra en su libro Narcos en el Uruguay: Lilo, Clavijo, Bocha y la Operación Campanita (editorial Sudamericana, 2014).

REALIDAD: EL SISTEMA FINANCIERO INTERNACIONAL QUEBRARÍA SIN LAS DROGAS



MITO 4. Algunos sensatos y bienpensantes defensores del turismo con estilo internacional aducen que “personalidades de prestigio, artistas, empresarios, deportistas,  son un imán turístico del cual sería absurdo prescindir”.

La liberalidad con que se venden y alquilan viviendas en Punta del Este, el respeto de la privacidad de los clientes y del secreto profesional de los especialistas que suelen asesorarlos, y la fluidez  para montar negocios quizás logrando eludir controles, hacen de Maldonado y Rocha en general, algo sumamente atractivo en el contexto nacional e internacional.

Sin embargo, solo como botones de muestra, basta recordar que pesan graves acusaciones sobre un presunto ex sindicalista argentino y sobre un ciudadano italiano que según el diario El País merece esta descripción: “Cae en hotel uno de los 10 más buscados de la mafia italiana. Vive en Uruguay hace más de 10 años y tiene una casa en Punta del Este”. https://www.elpais.com.uy/informacion/cae-hotel-buscados-mafia-italiana.html

Aunque menos grave, como ejemplo pintoresco, debe mencionarse el caso de una mediática argentina que solía elogiar a la dictadura de su país ayer aunque parecer haber variado sus posturas hoy: fue propuesta por un intendente uruguayo para nombrar una calle en reconocimiento de su apoyo al carnaval del departamento (antes las calles solían recibir los nombres de personas ilustres o ilustradas).


¿Serán casos aislados, no representativos? Yo encuentro alguno todas las semanas del verano. Por ejemplo, el de este empresario argentino: "Detuvieron en Punta del Este a un empresario argentino acusado de violar a su hija. El empresario fue detenido en un operativo de Interpol. La ministra de Seguridad argentina destacó la cooperacón internacional para capturarlo". https://www.elpais.com.uy/informacion/detuvieron-punta-empresario-argentino-acusado-violar-hijos.html


REALIDAD: NO ENCANDILARSE CON LOS "EXITOSOS"



COMENTARIOS FINALES

Hace muchos años, algunos organizaron una marcha a Punta del Este para expresar la injusticia de las diferencias sociales y quizás la corrupción de un modo u otro ligada al balneario uruguayo de fama internacional. Fracasaron en su intento pero tenían algo de razón, si tomamos en cuenta todo lo que hemos dicho. Hoy es inconcebible siquiera pensar en una marcha similar.

Al contrario. Por eso conjeturemos,  a modo de hipótesis de trabajo,  que más de un 50%  de los ciudadanos cree en las afirmaciones comentadas en las anteriores líneas y cantan loas al turismo que aspira a un "nivel internacional".

En este punto conviene aclarar que al oponerme a ellos yo no afirmo a rajatabla, solo pregunto y conjeturo, en base a información muy accesible y de la que aquí proporciono fuentes precisas. También señalo otro aspecto relevante: esas  dos mitades de la ciudadanía quizás no coincidan con gobierno y oposición. Se trata de personas que seguramente conocen las fuentes que aquí he utilizado: El Observador, El País, o los canales privados de la TV abierta del Uruguay.  Muchos incluso son votantes del FA. La información la tienen, pero no establecieron los  nexos antes señalados entre sus contenidos.

Un aspecto curioso, que es dado observar de hecho, es que quienes defienden turismo internacional, empresas privadas, consumo , clima de negocios, etcétera, suele a la vez rechazar otras cosas. Todo ello forma parte de una idiosincrasia más que de una cosmovisión ordenada. Es que, por ejemplo, se trata de individuos que  defienden todo aquello pero a la vez suelen criticar “las políticas sociales”, la labor del MIDES, etcétera.

Parecen ignorar que en realidad todas son políticas sociales. Lo reitero: todas son políticas sociales. 

El problema es si esas "políticas sociales" van a consistir en olvidarse aún más de los más vulnerables, en despojarlos en favor de aquellos que no necesariamente “la hicieron trabajando”, sino pagando mal y en negro a los trabajadores. Y si van a bajarse los brazos con las fiscalizaciones.

El problema es si esas "políticas sociales" van a continuar favoreciendo a los que corren riesgos para toda la sociedad al aceptar inquilinos o clientes financieros de gruesa billetera y trazabilidad desconocida, cuando no directamente cómplices del lavado de activos.

El problema es si se va a perseguir aún más a los pobres que menudean droga pero no habrá fuerza para enfrentar a quienes aportan el know how jurídico, notarial y contable para dibujarles las inversiones al crimen organizado.

Detengámonos en un punto, Es típico también cierto tipo de gestos de estos ciudadanos que no imaginan del todo esas políticas más decididas, tan sociales como las otras al fin y al cabo (pero perjudiciales al bien común). Por ejemplo, algunos ponen el grito en el cielo si asaltan una joyería de Punta del Este, y en particular enfatizan el daño a la imagen internacional del país. Olvidando, por decir lo menos, que el de las joyerías suele ser un negocio brillante pero con mucha oscuridad detrás como lo demuestran los recientes informes de Human Rigth Watch: 

“¿Sabe su joyero favorito de dónde provienen su oro y sus diamantes? Las gemas y metales preciosos a menudo se extraen en condiciones brutales. Los niños se lesionan o incluso mueren durante este trabajo peligroso. Las minas contaminan el agua potable con productos químicos tóxicos y, durante la guerra, los grupos armados se enriquecen (explotando comunidades enteras) por la riqueza que aportan estas joyas. La industria de la joyería debe abordar los derechos humanos en sus cadenas de suministro. Dígale que le gustaría que sus joyas sean de origen responsable”. 
Ver: https://www.hrw.org/behindthebling

Desconfiemos de esas otras “políticas sociales” que podrían sobrevenir si triunfasen los beneficiarios o los cómplices del narcoturismo, incluso si no obtienen ventajas de él y hablan por inercia y carencia de información. Ojalá que en las próximas elecciones sus defensores, “realistas”, “sensatos”, gente “de sentido común”, adherentes fervorosos a los cuatro mitos aquí analizados, no superen el 50% de los ciudadanos conjeturado líneas arriba.

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